COMENTARIO AL DESARROLLO DE LA ETAPA 4

Otur-Luarca-Canero-Alto de la Espina-Salas-Cornellana-Cabruñana-Grado-Sograndío-Oviedo-Colloto-Nava-El Remedio

DATOS TÉCNICOS

- Hora de salida de Otur: 08:30 horas.

- Estado del tiempo salida: nubes altas, temperatura 23 grados y humedad relativa 60%.

- Hora de llegada a El Remedio: 16:30 horas.

- Estado del tiempo llegada: sol con nubes, temperatura 24 grados y humedad relativa 60%.

- Velocidad media empleada: 24,9 Km/hora.

- Velocidad máxima alcanzada en ruta: 60,7 Km/hora.

- Pulsación máxima alcanzada en el recorrido: 170 pulsaciones.

- Pulsación media en el recorrido: 134 pulsaciones.

- Total Kilómetros recorridos: 146 Km.

DESARROLLO

de la

ETAPA  

Después del mal día anterior en lo climatológico, amanece con pequeñas nubes altas que, en principio, no amenazaban con agua. Desayunamos en el Hotel e iniciamos el recorrido con la subida que existe después de pasar Luarca. Se sube bien, y una vez pasado éste repecho iniciamos la subida al alto del Espino, la ascensión más prolongada que tenemos en el viaje, sobre 25 Km. de subida. La primera parte bastante fácil, y los últimos diez kilómetros con mayor dificultad, pero asequible. Cada uno sube como puede y yo espero en el alto para reagruparnos y comer algo. A renglón seguido, reiniciamos la marcha con una bajada encabezada por Julio y Celestino, de unos 30 Km., como si nos persiguiese el mismísimo diablo. El cuentakilómetros del coche de Esther, que nos seguía por detrás, dijo que marcaba 70 Km/hora (mi contador solo reflejó 61 km/hora, pero mantenido durante bastante tiempo). Maxi se queda del resto y nos reagrupamos en Cornellana. Se inicia la dura subida a la Cabruñana (más dura que La Espina, pero más corta), llegando al alto cada uno como puede. En el alto, después de la experiencia de la Espina, yo ya no espero a nadie, porque no quiero volver a bajar a altas velocidades. Maxi me alcanza y los dos bajamos, comiendo, bebiendo y recuperándonos del esfuerzo de las dos subidas realizadas. Antes de llegar a Grado nos reagrupamos, y cuando empezamos la última subida a Oviedo, en Sograndío, Celestino decide coger el coche escoba para neutralizar la subida y que lo traslade hasta la entrada de Oviedo. Julio no espera y se marcha solo, ya no lo veremos hasta casi el final de la etapa. Subimos el último alto antes de llegar a Oviedo y nos reagrupamos con Celestino en la entrada de la ciudad. Desde ahí, vamos hasta unos cinco kilómetros antes de El Remedio y comemos, ya todos juntos, un pequeño avituallamiento en un bar de carretera. Reiniciamos la marcha, pasamos por la casa de Celestino y finalizamos la etapa en la casa rural que se había contratado. Etapa dura por ser la de mayor kilometraje y con cuatro subidas considerables. Como la etapa anterior, se hizo "cada uno como pudiese", sin mirar para atrás.

COMENTARIO

Ya los ánimos de la víspera no presagiaban nada bueno, y esta etapa se convirtió en "llegar sin mirar para atrás" para comprobar que le pasaba al resto del grupo. Por lo menos, nos acompañó el tiempo, el paisaje, y la sensación de haber logrado el reto de llegar hasta Oviedo. Muchísimos kilómetros para nosotros, pero la sensación de que el físico nos aguantaba sin mayores problemas. Quedaba la subida final de Los Lagos.